¿Cómo preparar la ensalada perfecta? Trucos y consejos

Cuando pronuncias la palabra ensalada muchos lo entienden como un bol lleno de todas las verduras, frutas, frutos secos, vinagres, salsas que hay en el frigorífico de casa. Otros lo entienden como un plato soso, simplemente compuesto por lechuga, tomate, aceite, sal y poco más.

Nos encontramos con dos extremos totalmente inapropiados. Es cierto que puedes elaborar una ensalada con casi cualquier alimento, pero esta debe seguir un orden y los alimentos deben casar unos con otros y por supuesto ser de calidad.

A continuación, te mostramos unos trucos y consejos sencillos a seguir para devorar una deliciosa y variada ensalada.

Los vegetales y hortalizas son imprescindibles en una buena ensalada. Lo normal es utilizar lechuga, pero hay toda una variedad que puede aportar sabores interesantes como el brócoli, la rúcula o el canónigo.

Es muy típico ver la zanahoria o remolacha de bote cortada a tiras. Si lo que quieres es una ensalada de calidad, te recomendamos descartar esos dos productos y añadir calabacín o berenjena a láminas. No es mala idea mezclar ambas.

Dependiendo del tipo de sabor que quieras puedes añadirle alguna hierba como la albahaca para dar un toque fresco o cebolleta que aportará un sabor más fuerte.

Como alimento más pesado podemos añadir huevo cocido a laminas o si eres de los que no puede dejar la carne a un lado, el pollo también es un buen compañero para las verduras.

Olvídate de los picatostes o la cebolla frita crujiente si lo que buscas es una ensalada sana a la vez que perfecta. Nosotros recomendamos sustituirlo por nueces o semillas de sésamo.

Para completarla del todo un buen chorro de aceite de oliva virgen extra es el aliño más saludable que puedes aportar. Si con eso te parece un poco sosa siempre puedes añadir una salsa de yogurt o alguna vinagreta si te prefieres los sabores fuertes.

Con esto ya tienes la clave para mejorar tus ensaladas y disfrutarlas de verdad.

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